Te enseñamos a hacer una comida fácil pero sofisticada para sorprender a tus comensales y disfrutar en compañía.
Porciones: 14 rodajas aprox.
INGREDIENTES
✔ 1 pollo deshuesado 2 kg aprox.
✔ Sal, pimienta a gusto
✔ 1 cucharada de mostaza
✔ Jugo de medio limón
✔ Manteca (mantequilla) para untarlo
Relleno
✔ 100 gramos de queso roquefort
✔ 100 gramos de queso parmesano
✔ 150 gramos de queso gruyere
✔ 200 gramos de queso muzzarella o mozzarella
✔ 1 cucharada de gelatina sin sabor
Salsa para bañar
✔ 50 gramos de manteca (mantequilla)
✔ ½ taza de leche (125 cc.)
✔ Quesos
Papas noisette
✔ 6 papas grandes
✔ Aceite
✔ Sal y pimienta
PREPARACIÓN
Lavar y secar el pollo con un paño limpio. Extenderlo sobre la mesada con la piel hacia abajo y salpimentarlo.
Cortar los quesos en cubos pequeños y distribuir las tres cuarta parte sobre la carne de pollo. Espolvorear con la gelatina en polvo y pimienta en grano recién molida. Enrollarlo y coserlo con puntadas largas, ajustando solamente, sin apretar la puntada para que la carne no se rompa. Luego prensarlo con hilo pero sin ajustarlo demasiado. O colocarle una malla que se vende especialmente para estos arrollados.
Colocarlo en una placa de horno, rociarlo con el jugo de limón y untarlo con manteca y mostaza. Cocinarlo en un horno caliente de 190º precalentado durante 15 minutos. Luego bajar la temperatura a 180º y terminar de cocinarlo aproximadamente 15 a 20 minutos más. Debe quedar bien dorado. Para cortarlo esperar 10 minutos una vez sacado del horno.
Salsa de queso
Poner en una cacerola chica el resto de los trozos de queso que reservamos del relleno. Agregarle la leche y la manteca. Llevar a fuego suave mezclando siempre hasta que los quesos se fundan.
Colocar esta salsa sobre una fuente y colocar el arrollado encima.
Es un plato para servir caliente.
Papas noisette
Lavar bien las papas y pelarlas. Formar las papas noisette con la cucharita especial para ellas. Una vez prontas ponerlas en una cacerola y cubrirlas con agua y llevarlas al fuego hasta que rompa el hervor. Retirarlas enseguida y dejarlas sobre un paño para que se oreen.
Poner en una cacerola chica y profunda abundante aceite con una ramita de romero. Una vez bien caliente el aceite se colocan las papas y se retiran apenas estén doradas. Se apoyan sobre papel absorbente y se sirven enseguida.